Desarrollo embrionario y fetal
Fertilización
La fusión del espermatozoide masculino con el óvulo femenino se da en la trompa de Falopio. 23 cromosomas del padre y 23 cromosomas de la madre para reunir 46 cromosomas, la fórmula del nuevo ser.
El sexo del bebé se determina en el momento de la fertilización exactamente. El cromosoma sexual que aporta la madre siempre es “X”, mientras que el padre aporta un cromosoma “X” o uno “Y”. El cromosoma “Y” es el que determina el sexo masculino, mientras que el “X”, el femenino: Con 44 “XX” el bebé será niña y si tiene 44 “XY” será un niño. El conteo cromosómico total es de 46.
Primeras imágenes del nuevo ser
Pocas horas después de la fertilización se produce la primera división, el óvulo tiene ahora 2 células, cada una de las cuales contienen genes de la madre y del padre. Cada 12-16 horas las células se dividen nuevamente al tiempo que empiezan su migración, desplazadas por los cilios de la trompa de Falopio para llegar a su destino en la cavidad uterina donde continuará su desarrollo.
Ocho días. Implantación
Después de numerosas divisiones y un desplazamiento constante, por fin, el blastocito, como se llama en este momento, llega al endometrio, revestimiento mucoso en el interior del útero. En este estadio, el incipiente embrión contiene aproximadamente 200 células y es cuando comienza a diferenciarse y organizarse.
Laboratorio especializado que cubre las necesidades específicas de las clínicas de reproducción asistida: Gonadotrofinas, medios e insumos.